Hereafter (Más allá de la vida) Clint Eastwood; 2010
Déjà vu
No es la primera vez: hace años, soportaron pacientemente mis enojos e indignaciones aquellos que me acompañaron a ver Juno (Jason Reitman, 2007)unos pocos días después de haber visto la magnífica 4 meses, 3 semanas y 2 días (Cristian Mungiu, 2007).
Llámenme chiflada, pero aquello olía a chamusquina y para mí, se trataba de dos versiones de un mismo asunto, guiadas con dos estilos de dirección y guión bien diferentes y, como siempre, pensando en públicos objetivos harto opuestos, antagónicos, incompatibles.
Quizás sea cuestión de moda o de tendencia, nada más. Tal vez se imponga subliminalmente una temática que llega a nosotros, simples conejillos de indias del imperio comercial, para ponernos a prueba y saber si ese asunto funcionará o no, si se hará negocio con él o será un fiasco. Puede que sí o puede que no, pero sigue siendo todo muy raro.
¿Qué tendrían que ver las trágicas decisiones que dos adolescentes rumanas se ven forzadas a tomar durante un período social y político del todo inoportuno, con el ñoño quebradero de cabeza de la insoportable y sabionda chavalita preñada estadounidense? Yo concluyo que mucho.
Ahora repito experiencia.
Hereafter recrea las vidas de personajes que, por un motivo u otro, contactan con la muerte y/o el más allá (ese gran desconocido, tan bien explotado): un poco de romanticismo, un niño desgraciado de madre yonki, buenas dosis de retoque digital y discursillo moral servido en bandeja. Podría parecerlo, pero no se trata de un anuncio de cocacola, sino del último y vergonzoso trabajo de Clint Eastwood como director.
Y resulta que a mí mi me suena a Biutiful, película que en anteriores entradas a este blog ha sido comentada positivamente y que en otros espacios se ha machacado sin piedad. Respecto a los gustos personales, que cada uno decida lo que más le apetezca, pero que nadie niegue que, siendo argumentos diferentes, en ambas películas se habla de lo mismo, pero pensando en públicos opuestos.
La blandenguería acaramelada y facilona de Eastwood, que sin importarle lo más mínimo las incoherencias en la trama, subraya al espectador con rotuladores fluorescentes aquellos momentos en que debe llorar o reír, como si fuera incapaz de hacerlo él solito sin ayuda, contrastan con la brutalidad poética de González Iñárritu, excesiva en todo lo que muestra para que desde la butaca del cine, cada uno filtre y cada uno le llegue aquello que mejor quiera entender.
O llámenme chiflada.
Vaya, pues estamos bastante de acuerdo respecto a esta película. Mi opinión sobre Eastwood, que se le sobrevalora muchísimo. Es verdad que tiene ese aire a cine clásico (esta película puede que menos) y sin hacerlo nada mal el regusto a moralina retro me carga cosa mala.
Biutiful, pues tampoco me gustó. Se pasa, pero por el lado opuesto, como yo lo veo. Y ni lo uno, ni lo otro.
Me gustaMe gusta
Para gustos están los colores, Babel: creo que es tan bueno coincidir como discrepar en opiniones. Supongo que por eso sobrevive el mundo del arte y/o el espectáculo.
Yo también pienso que a Clint se le sobrevalora, sobre todo últimamente, que le está dando por hacer cosas raras… quizás sean los años, o que alguien está metiendo baza más de la cuenta en sus historias. En cualquier caso, que le quiten «lo bailao» ¿no?.
Me gustaMe gusta
A mí me comentaban el otro día: «pues si fuese de otro director, la consideraría una buena película, pero al ser de Eastwood, como que me deja un poco flojo».
Es decir, con esto damos a entender que el público cuando va a ver cine de Eastwood, pretende ver algo tipo «Cartas desde Iwo Jima» o si me apuras «Un mundo perfecto». Pero claro, se presenta con algo más comercial, y a la gente ya no le hace tilín.
Quizá nos acostumbren o vendan mal el cine de cada uno, pero como dices, María, para gustos colores. Sinceramente, yo personalmente, prefiero ver antes otro film de la cartelera que resulte más llamativo, como «¿Como sabes si…?» del director de «Mejor… imposible», aunque no tenga ni idea de que va, pues ya me veo que al menos me reiré.
Me gustaMe gusta
Di que sí, Dani: ¡que viva la variedad de gustos! a propósito, ya que te has metido a comentar, me hubiera gustado que vieses la peli, aunque sólo sea para aclarar mis dudas como experto respecto a la banda sonora, que me parece igualita a la de «Gran Torino» ¿puede ser que incluso sea la misma? ¿Clint hace autoplagios? o peor aún: ¿se los hace su hijo?.
Saludos.
Me gustaMe gusta
Respecto a eso, hace poco que he escuchado la banda sonora, y te comento lo siguiente. Todo compositor se deja sus rasgos de composición presentes en cada obra. Un ejemplo claro es John Williams, que siempre parezca que haga el mismo estilo (aunque destaca de vez en cuando). Con Eastwood pasa algo parecido, pues sus toques de piano y guitarra predominan casi siempre en sus piezas con el estilo que se escucha muchas veces en sus obras. De todas formas, en breves analizaré la banda sonora a fondo en la web, así que ahí podré ser más claro con lo que preguntas.
Me gustaMe gusta
Espero esos comentarios tan ilustrativos para leerlos, Dani. Gracias.
Me gustaMe gusta