Rescue Dawn. Werner Herzog, 2006
You’re a strange bird, Dieter
El mes pasado, este santo blog cumplió cinco años en activo y sin descanso. En esos cinco años, nunca jamás, nadie había tenido la osadía de llamarme la atención por ningún post que en él haya colgado. Nadie, insisto: nunca.
Ayer sin embargo, en uno de esos extraños momentos en los que el destino quiere jugar con nosotros y poner un poco a prueba nuestra resistencia a las críticas, alguien mucho más preparado que yo sobre los temas de los cuales yo quise hablar en esta entrada, me dio un toque y me recomendó corregir las barbaridades que en él se habían dicho.
Contrariamente a lo que ustedes puedan pensar (que los conozco) yo acepto las críticas de muy buena gana, cuando vienen de gente que sabe lo que dice y no quiere sólo «hablar por joder» o «joder para hablar» si me disculpan la expresión. Así que aquí estoy: corrigiendo y enmendando.
Decíamos ayer… que Rescue Dawn me había gustado mucho y explicaré por qué sin meterme en berenjenales que no me competen y así, todos nos entenderemos mejor: Me he reído con Christian Bale, en el cuerpo de Dieter Dengler, con todo el sarcasmo y la socarronería que uno menos podría imaginar dadas las circunstancias (a saber: jungla, torturadores, hambre, riadas…) Me ha entusiasmado la originalidad del director cuando se ha propuesto contar el proyecto de huida y de lucha por la vida de este piloto empeñado en volar desde que vió a un avión de combate hacer añicos su pueblo, siendo un crío.
No contento con su documental sobre Dieter Dengler, Little Dieter Needs to Fly (1997) Werner Herzog tuvo que agarrar a Christian Bale y ponerlo a exprimir sus carnes y sus huesos hasta quedar enjuto como la mojama para encarnara alguien capturado y torturado por el Vietcong durante la guerra de Vietnam.
Rescue Dawn recrea los pesares de Dieter desde que lo mandan a sobrevolar Laos en la que es su primera misión de alto secreto, hasta que lo rescata un helicóptero de la misma «armada invencible» que lo había enviado allí tres semanas antes.
Que nadie malinterprete estos comentarios y juzgue la película de Herzog como remotamente semejante a la de Angelina Jolie que tantos disgustos nos ha dado en este blog… no, no hay comparación posible, aunque ambas se refieran a personajes reales que lo han pasado mal, muy mal al caer de un avión. Son mundo paralelos. Multiverso mismo.
Y es que el director, es admirado por sus colegas de profesión por el esmero que pone en el retrato de gente peculiar (algo zumbada y algo genial a veces, no siempre en la misma proporción) por su cuidado a la hora de poner sonido a sus historias (gente que susurra y respira, que pisa tierra… paisajes nevados que son silencio puro sin brisa, sin eco de nada) por la lentitud de algunos de sus planos, que se detienen parsimoniosos ante lo que quiere que veamos que está sucediendo, sin acudir a un montaje que tergiverse o mejore la narración de las cosas. Así es Werner Herzog, Angelina, lo siento, no se puede tener todo.
Un pájaro raro, efectivamente.
Espero contar con su aprobación. Les saluda atentamente:
La autora, sin complejos
María
Deja una respuesta